El presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), José Salvador Fuentes Zorita, visitó ayer, junto a la alcaldesa de Los Alcázares, Encarna Gil Castejón, las obras de aumento de los recursos destinados a riego en el Campo de Cartagena y la mejora de las defensas contra avenidas. Esta actuación está enmarcada en el Fondo Especial del Estado para el Estímulo de la Economía y el Empleo (Plan E). El presupuesto asciende a
1.250.000 euros y está siendo ejecutado por ALTEC Infraestructuras SA. Los trabajos se iniciaron en abril y ha finalizado ya la primera fase, destinada a la limpieza del canal D-7, de una longitud total de 3,4 kilómetros. Ahora restan las obras de recrecimiento, para aumentar su capacidad de transporte de agua, que serán acometidas en un tramo de 700 metros de la margen izquierda.
El drenaje D-7 es un cauce artificial que fue realizado durante los proyectos de mejora de los regadíos del Campo de Cartagena, destinado a canalizar hasta la rambla del Albujón y el mar las aguas procedentes de las escorrentías superficiales en épocas de lluvias en la zona de Los Alcázares y las de retorno de riegos. También recoge recursos con elevada concentración salina e impide que lleguen por filtración subterránea al mar. Estos recursos son tratados en la desalobradora del Mojón, en San Pedro del Pinatar. Sin embargo, la citada planta no está trabajando actualmente al máximo de sus posibilidades y puede recibir mayor cantidad de aguas salinas si se aumenta la capacidad del canal.
La mejora de las condiciones de funcionamiento del D-7, mediante la limpieza de la vegetación existente y el acondicionamiento de cajeros, permitirá un incremento de los volúmenes drenados, que una vez tratados en la planta del Mojón, incrementarán los recursos disponibles para regadío.
Contra las inundaciones
Estas labores de limpieza, unidas al recrecimiento y la consolidación de un tramo de 700 metros de la margen izquierda del canal, así como la implantación de especies arbustivas autóctonas y otros trabajos reparación del D-7, han posibilitado que se eviten episodios como los del mes de septiembre del año pasado, cuando la intensas precipitaciones provocaron inundaciones en la localidad costera e incluso pusieron en peligro a los alumnos del Instituto de Enseñanza Secundaria de Los Alcázares, que tuvo que ser desalojado en plena jornada escolar.